hoy te he sentido caminar a mi lado ibas en silencio como murmurando palabras de luna ternuras de sol hoy te vi en el bosque cuando amanecía corriendo descalza con un libro abierto convertida en viento paisaje sin tiempo parecías lejana y estabas tan dentro valles de algodón tañendo en campanas volando a tus anchas te me repetías en cada recuerdo y yo que te buscaba desatando nudos con mi pena lírica abriendo ventanas entre laberintos arriba en el cielo te encontré en el agua de mis propias lágrimas y entre los latidos de mi corazón Pinka porque todo pasa se durmió tu sueño porque todo vuelve porque todo vive donde lo sembraste tu sueño no ha muerto © Patricia Velasquez de Mera
No es el hombre por hombre superior más que a la sombra de sus propios pasos, muchas veces el hombre es un payaso que ríe entre sus ganas de llorar. No es el hombre el señor del universo, sólo es grano de arena en playa vieja, sólo es hueso fugaz, tímida queja que aprende lentamente a caminar. No es el hombre inmortal, no es dios ni es vino, el hombre es el camino, no es el norte, invitado temporal del horizonte, lluvia breve, libertad por alcanzar. Dagor