Amado Padre:// Otro domingo para celebrar que soy fruto de tu semilla, para festejar tu mirada, tus convicciones, tu presencia que se mantiene radiante, sin sombra alguna sobre el ya largo camino de mi vida. Un domingo en el que con un poco de suerte, alguien te llevará flores y las depositará junto a la tumba en la que pretenden que habitas. Si el ramo aguanta el sol canicular de Guayaquil, seguramente, como por arte de magia, terminará en otro lugar. Y tú, seguirás tan campante.// Si estuvieras físicamente vivo, tendrías cien años, edad suficiente como para estar no solamente mucho más allá del bien y del mal, si no como para haber comprobado que no importa cuánto se haya sacrificado una generación o varias abriendo camino para que un pueblo alcanzara su libertad, ya que basta que nazca un tirano, que crezca un tirano y llegue al poder, para echar a la basura cualquier constitución que proteja a los ciudadanos de una nación, y armar un nuevo libro de leyes que se ajusten a su prepote...
No es el hombre por hombre superior más que a la sombra de sus propios pasos, muchas veces el hombre es un payaso que ríe entre sus ganas de llorar. No es el hombre el señor del universo, sólo es grano de arena en playa vieja, sólo es hueso fugaz, tímida queja que aprende lentamente a caminar. No es el hombre inmortal, no es dios ni es vino, el hombre es el camino, no es el norte, invitado temporal del horizonte, lluvia breve, libertad por alcanzar. Dagor