Ir al contenido principal

YO SOY GUAYAQUIL, poema para LEON FEBRES CORDERO RIBADENEYRA en el día de su partida

yo soy Guayaquil
la niña de tus ojos
León Febres Cordero
yo soy esa mestiza que amanece
de un sueño recurrente
invicto irrenunciable
llamado libertad

mi canto es esa voz
del viejo río Guayas

yo corro por el cerro
jugando a las casitas
persigo a las iguanas
que alegran mis historias
bailando en las orillas
del Estero Salado

yo soy Guayaquil
tú mi soldado
León Febres Cordero
el que llegó rugiendo
para ahuyentar piratas
y con hilos de plata
cual duende enamorado
me restauró el vestido
la gloriosa bandera
por siempre azul y blanco

guerrero invencible
León Febres Cordero
hoy me has hecho llorar
al levantar el vuelo
sin claudicar un paso

como a sirena en duelo
me dejaste un abrazo
dibujado en la orilla
te bajaste del barco
caminaste a las aguas
del mar de lo infinito
sin mirar hacia atrás
me besaste las manos
y partiste al encuentro
del regazo final

por eso estoy aquí
porque yo soy Guayaquil
tu heroico pueblo
palpando reverente
tu frente en el cristal
mis lágrimas son hombres
caminando a tu lado
llevándote al descanso
hombros del soberano
que no te olvidará

León Febres Cordero
la Catedral te reza
el luto es permanente
pero de tus lecciones
sacaremos la fuerza
para seguir venciendo
a los filibusteros
que intenten destruir
tu legado ejemplar

mañana el cementerio
estará solitario
las flores que hoy se abrieron
se secarán al viento
del sol canicular

mas en el Malecón
seguirás levitando
Rotonda y Centenario
recorriendo las obras
como Alcalde inmortal

© Dagor PVV
Raleigh, 17 de Diciembre de 2008

Entradas populares de este blog

EDDIE CHIANG

Hace un cuarto de siglo Eddie Chiang Espinoza ya estaba cantando… Empezó a hacerlo hace cincuenta años, en el vientre materno. La adolescencia lo sorprendió abrazado apasionadamente a una guitarra. Una de las voces más exquisitas de la música popular en el Ecuador, Eddie se compenetró con su destino de cantante desde muy joven, comprendió que la tarea no sería fácil pero sería hermosa, supo que con su voz podía encarnar al poeta, al compositor y aportar con su interpretación impecable para formar un trío de un sólo hombre, una amalgama de técnica, ternura y pasión con la cual llegaría a tocar el alma de todo el que haya tenido el privilegio de escucharlo. El título de su primer long play "INTIMIDAD" sin duda marcó su trayectoria Su canto es siempre íntimo, se le hace fácil llegar por el oído al corazón del público. Su voz fluye naturalmente, como cuando el pintor se para frente al lienzo y las imágenes empiezan a plasmarse solas, a cobrar sentido, a tener una razón de ser s...

8002 SYCAMORE

(Foto: "La Laguna" por Patricia Velasquez de Mera. New Orleans, 1998) 8002 Sycamore Llegó apurado, frotándose las manos. Apretaba el periódico del día bajo su brazo izquierdo. En la mano derecha, como de costumbre, llevaba un pan empacado en papel de cera. Hacía frío, pero también como de costumbre, no llevaba calcetines y sus canillas blancas como la nieve relampagueaban entre los mocasines y el pantalón. Depositó el pan sobre la mesa y se sentó de espaldas al salón, frotando sus manos una contra la otra por largo rato. Little Watch (relojito) apareció de algún rincón y moviendo la cola se le pegó a la pierna con familiaridad hasta que se escuchó el grito: Maldita sea! Ya me pasaste el puñado de pulgas. Se levantó agitado, abrió la puerta y Little Watch salió pitando por ella. Volvió sobre sus talones y se dirigió a la chimenea, prendió el fuego sin sacarse el abrigo y se metió en la cocina. Mientras pasaba café leía con interés el diario y tomaba con placer -como si aquello...

Quito

Quito trinchera de luz desde los gélidos pechos  de tus volcanes dormidos desde los parques alegres de tu casco colonial eres Quito señorial la capitana de todas las ciudades que enarbolan el escudo nacional Quito soberana cita andina  donde el humano camina entre política y sal entre el granizo y la gloria de una infatigable historia en pos de la libertad Quito cajita de música  con vestido de española añorando serenatas de romántico pasado entre ponchos de colores canelazos y poetas que brindan por tus nevados de pie en la mitad del mundo patrimonio cultural estás Quito monumental florecida e ingeniosa  jugando a la arquitectura uniendo el ayer y el hoy bajo la venia de Dios en tu cara reflejado Dagor 1988